sexta-feira, 3 de dezembro de 2010

Esperar significa: ocuparse en algo

Al terminar el colegio decidi que dedicaria mi vida a ayudar a las personas, no sabia como, pero solo queria ayudar y sentirme util. Tal vez no podria cambiar al mundo, pero si podría ayudar si quiera a una persona a la vez. La pregunta era: Como hago eso?

Pocos días después de recibir mi test de orientación vocacional, que por cierto solo me lo entregaron en una hojita bond escrita a mano que llegue a conservar por muchos años hasta que mude los libros de la biblioteca a otro lugar de la casa, me di con la triste noticia que no tenia vocacion ni cualidades personales para estudiar teología. En verdad, no sabes como fue de frustante para mi leer que los resultados de ese test, y darme cuenta que talvez podia dedicarme al arte pero menos a la teologia. Fueron dias de dudas y cuestionamientos personales. Me sentia muy confundido.

El tiempo paso rapido, y después de trabajar dos años para ir a la Upeu, me veia entrando por la primera garita de la universidad. No sabes como me senti ese día, pareciera que todo era perfecto y que por fin habia llegado aun lugar con gente como yo. Jovenes que querian estudiar y servir a su iglesia. Por cierto, no le hice caso a los resultados del test y estava decidido mas que nunca estudiar teologia.

Y fue en mis practicas pastorales de fin de semana que empeze a darme cuenta que las personas tiene problemas y quieren ser escuchados y a veces aconsejadas. Visitarlos en sus hogares, compartir algun almuerzo con ellos, callar cuando ellos hablan, y dar alguna palabras de esperanza me mostro que los seres humanos tarde o temprano nos encontraremos sentandos en el sofa de la espera. Y todo ello se a hido afirmando, cuando converso con los jovenes.

Jovenes como yo. Que lloran, que rien, que juegan, que bromean...jovenes que a primera vista pareciera que todo en su vida es perfecto, pero la realidad distanta tanto de la apariencia a veces. Jovenes que me han mostrado en sus confesiones personales o virtuales, cuando nos parecemos a veces todos nosotros. Te sorprenderias de las cosas que he escuchado y las palabras que he oido a lo largo de todo este tiempo. Cuantas vece he siento mi corazon batir tan fuerte cuando escuche el desenlace siniestro de un testimonio que me estan narrando, de lo perplejo que me puesto cuando no podia creer en las cosas que he escuchado, en la alegria que se sentido cuando alguien a vencido el pecado. Todo ello me he demostrado que pareciera que Dios me usa para ayudar a las personas.

Y como lees, mientras te espero, me ocupo haciendo algo. Trabajando en aquello para lo cual no tengo habilidades inntadas, pero convencido que tengo un llamado divino para ser parte de una obra extraordinaria:
De esta manera, mientras vivo la vida y veo los dias pasar lentamente en mi, me ocupo en los negocios del Señor. Talvez de esas manera no sienta tanto el pesar de no tenerte aun a mi lado, creeme, la espera se hace mas llevadera ocupandose en algo.

sexta-feira, 27 de agosto de 2010

Por que escribir un diario?

Empecé a escribir desde hace dos años atrás. Como ya lo relate alguna vez, todo empezó como una autoterapia que empecé voluntariamente para superar una decepción amorosa. Sin embargo, hoy por hoy, aquella motivación que me guiaba y me sumergía en una profunda melancolía se ha ido disipando, dejandome como recuerdo solo este hábito de seguir escribiendo.A raíz de ello, decidí firmemente que la siguiente persona con la que tendría alguna relación sentimental en el futuro, sería mi esposa.
Eso significaría, empezar a cambiar muchas cosas en mí. Significaría dejar de intentar saber quien es la persona correcta, para tener que esperar y hacer la decisión correcta.
!Que tarea tan difícil! dejar de intentar, para luego esperar no es algo tan común en nuestra sociedad, inclusive para aquellos que solemos congregar en una iglesia cristiana los fines de semana.
Confieso que cuando pienso en la idea de esperar, no siempre me anima la decisión ya que estar solo por un tiempo indefinido que ya no me corresponde a mí decidirlo me a tenido muchas veces con preguntas e incertidumbres sobre un mañana que en verdad es totalmente desconocido.
Un día, mientras me encontraba pensando nuevamente en ello, se me ocurrió la idea de registrar mi lucha contra la soledad y la espera incierta, dejando como legado para mis generaciones futuras lo que significa esperar ella. 
No sé cuanto tenga que seguir escribiendo. Ni sé tampoco cuando la conoceré, lo único que me anima, es saber que toda espera, siempre tiene su recompensa y toda oración también su respuesta. En este viaje solitario hacia los años de madurez y equilibrio emocional no he estado solo. Dios siempre ha estado conmigo. Con mis aciertos y errores, he podido percibir que hay alguien que esta muy interesado en mi felicidad y ese es Dios.
Como su mismo nombre lo dice, un diario, es un registro permanente de la cosas que nos van sucediendo. Buenas o malas, o como queramos catalogarlas la vida cada día nos muestra algo diferente, una lección que aprender mientras esperamos y seguimos esperando por aquel gran día. Encontrarnos por fin con ella. 
Por eso decidí escribir hace ya dos años. Hasta hoy voy registrando más de 260 días de mi vida esperando por conocerla. Cada historia que he registrado, tiene una lección de por medio y espero que algún día ella también pueda ser parte de ello.